Papás, ahora que se acerca la fecha de regreso a clases presenciales o en línea, es importante estar muy atentos sobre el comportamiento de los hijos ya que estarán expuestos y podrían ser víctimas de las diferentes formas de bullying o acoso. El día de hoy estaremos comentando sobre algunas señales que pueden indicarnos si los críos están siendo víctimas de este mal.

El bullying físico, además de ser el más común se da principalmente en los menores y es muy frecuente en las escuelas, además es difícil de detectar pues los niños se encuentran lejos de la vista de sus papás. Puede darse a través de agresiones como humillaciones, golpes, empujones, amenazas, destruir objetos del acosado, robarlos o esconderlos, insultar, enviar notas, difundir falsos rumores, poner apodos, aislarlo del resto del grupo, entre otros.

Con la tecnología el bullying ha tomado otras formas extendiendo los agravios a otras latitudes y dando paso al ciberbullying, que ahora con el aprendizaje en línea, la exposición de los niños a las cámaras de los dispositivos los ha convertido en blanco de agravios en las redes sociales donde el agresor tiene la facilidad de mantener oculta su personalidad para molestar a la víctima.

Cualquiera que sea el tipo de acoso o bullying afecta la estabilidad emocional y autoestima e incluso puede llevar a algunas personas a conductas autodestructivas. Estas son algunas señales de que tu hijo podría estar sufriendo alguna forma de bullying:

• Cambios de humor sin motivo aparente. En el caso de ciberbullying, puede ponerse de mal humor o mostrar nerviosismo después de usar los dispositivos.

• Bajo rendimiento escolar.

• Si dice que ya no le gusta la escuela o inventa excusas para no ir.

• Llega con sus cosas rotas.

• Cambia sus hábitos. Presenta alteraciones en su alimentación y sueño. Puede llegar a evitar socializar, tener mayor irritabilidad, miedo y ansiedad. Baja autoestima.

• Repentinamente cambia la cantidad de tiempo que pasa en los dispositivos. Si pasa más tiempo probablemente esté rastreando lo que el acosador publica de él o lo que comentan sus compañeros. Si pasa menos tiempo, es posible que esté tratando de evadir por lo que está pasando

• Se vuelve más discreto cuando usa el celular. Ya sea que vaya a otra habitación para revisar lo que se publica de él o cuando te acercas de inmediato cierra las aplicaciones o lo que está viendo. Se niega a hablar de lo que hace o mira en el celular.

• Se enoja o deprime después de haber estado tiempo con el celular. Observa si hay nerviosismo o ansiedad después de que usa los dispositivos.

Papás, es muy importante mantener una estrecha comunicación con los críos y transmitirles confianza para que puedan expresar lo que les está ocurriendo, de esta manera podremos detectar a tiempo si están siendo víctimas de algún tipo de bullying y saber cómo actuar para ayudarlos.

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