El día de hoy hablaremos sobre un tema muy importante que como madres y padres debemos tener en cuenta para estar alerta sobre cualquier cambio emocional que pueda afectar a nuestros pequeños.
La depresión se puede describir como el hecho de sentirse triste, melancólico, infeliz, abatido o derrumbado y puede presentarse en niños, adolescentes, adultos y adultos mayores.
Es de suma importancia no confundir la tristeza que es una emoción de la condición humana con la depresión la cual es una alteración grave del estado de ánimo.
Dicha alteración se puede presentar en los chicos de forma severa y de larga duración, además interfiere en todos los aspectos de su vida diaria, desde el rendimiento escolar o en actividades extra curriculares hasta sus relaciones con amigos y familiares.
A continuación te dejaremos algunos síntomas que puedes detectar para saber si alguno de tus hijos está pasando por algún mal momento y por ende sufrir de depresión. Aunque claramente es importante que al darnos cuenta de ello acudamos con un especialista.
Pérdida de interés
Podemos darnos cuenta cuando deciden pasar menos tiempo en las actividades que les gustaba hacer.
Pérdida de energía
Este punto va de la mano con el anterior, ya que los pequeños suelen poner como pretexto estar cansados para no realizar ningún tipo de actividad, incluso las que hacían sin necesidad de pedirlo.
Cambios en el estado de ánimo
Normalmente los niños suelen estar más irritables, malhumorados, tristes o abatidos, además estos cambios de ánimo cambian de manera abrupta.
Cambio en el apetito
Dejan de comer como lo hacían antes y ni siquiera prueban su platillo favorito. Esto tiene repercusión en el peso, puede aumentar, disminuir o estancarse.
Cambio en el sueño
En su mayoría presentan dificultades para a dormir o sueño en exceso, lo cual repercute en la energía que tendrán durante el día.