De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), en México el 50% de la población adulta posee un cierto nivel de intolerancia a la lactosa, uno de los principales componentes de la leche.
Con el paso del tiempo es posible que el cuerpo deje de producir lactasa, la enzima encargada de digerir la lactosa, este es el principal motivo por el cual el sistema digestivo deja de procesar adecuadamente los lácteos, principalmente la leche.
Consumir queso, leche o yoghurt cuando se tiene poca producción de lactasa puede causar inflamación, dolor abdominal, gases y diarrea; todas estas molestias se atribuyen a lo que se conoce como “intolerancia a la lactosa”.
“Dado que la leche y sus derivados son un grupo de alimentos necesario para el buen funcionamiento del organismo, se ha buscado producir lácteos con menos lactosa, para este proceso se añade la enzima lactasa. Este tratamiento de “deslactosar” brinda a la leche y al yoghurt un sabor más dulce, esto ayuda a que las personas que no digieren bien la lactosa puedan seguir gozando del consumo de leche y sus beneficios”, asegura la nutrióloga Valeria Rubio.
Por sus cualidades nutricionales, la leche representa un alimento primordial en la salud a nivel mundial. Tomar las proporciones adecuadas de este alimento durante el crecimiento contribuye a formar huesos fuertes y durante las diferentes etapas de la vida, previene algunas enfermedades como la osteoporosis, razón suficiente para no dejar de incluirla en la dieta diaria.
Alpura, empresa mexicana preocupada por el bienestar de los mexicanos, cuenta con una extensa lista de productos deslactosados cuyo proceso de disminución de lactosa no afecta la calidad nutrimental del alimento; se conserva el valor biológico de sus proteínas, la calidad de sus ácidos grasos, la cantidad de calcio y demás minerales, así como sus vitaminas.
Leche alpura deslactosada y deslactosada light, además de sus derivados como la crema y el yoghurt son productos de fácil digestión adicionados con vitaminas A y D que ayudan a la absorción de calcio en los huesos y fortalecen los músculos por su alto contenido en proteínas.