De acuerdo con el sitio Psicología y Mente la envidia es un sentimiento de dolor y frustración ocasionado por la no tenencia de un bien, característica, relación o suceso deseado que quisiéramos tener y otra persona sí posee, viendo esta situación como injusta.
El sentimiento de envidia es un fenómeno común en los seres humanos, y surge de las propias insatisfacciones por no saber realmente lo que queremos, y pensamos que, si tenemos lo que el otro tiene, con eso le estaremos dando satisfacción a nuestra vida.
Tener envidia por algo que el otro tiene, puede ser un obstáculo para una relación sana. Existe la envidia sana, lo que se puede envidiar, pero sin desear ningún mal a la persona que lo posea. La envidia pura, se basa en el hecho de que sentimos que somos más merecedores de lo que la otra persona tiene, e incluso se puede sentir alegría si el otro llegara a tener un fracaso.
Pero ¿qué sucede cuando el objeto de la envidia es la pareja? El sentir envidia por lo que tiene o a logrado el otro puede llegar a romper la armonía y la estabilidad de la pareja, en el peor de los casos puede surgir resentimiento que será aprovechado para criticar al otro en todo lo que haga con la finalidad de hacerlo sentir mal, ya de esta manera sentirá superioridad.
¿De qué puede llegar a sentir envidia una pareja? Pues de sus cualidades y habilidades, logros profesionales y reconocimiento, de un sueldo mayor, de que los hijos se diviertan más con el otro, disfrutar de más tiempo libre, de algunas pertenencias, de ser más sociable, de las facciones físicas o de que al otro le haya funcionado mejor la dieta que comenzaron juntos y bajó más de peso, y puede ser por muchas otras cosas más.
Si hay envidia en la pareja, uno se convertirá en el mayor crítico y señalará sus defectos criticando todo lo que haga la otra parte, es posible lo haga frente a otras personas; no reconocerá sus éxitos y siempre tendrá una frase negativa desmereciendo sus logros, y si se llegara con el ánimo de platicar lo alcanzado, no prestará atención o cambiará de tema restándole importancia y desanimando por completo al otro. Igualmente, si uno llegara a equivocarse en su trabajo, no dejará pasar la ocasión de señalárselo, pues disfrutará gracias al error del otro.
En una relación de pareja donde hay amor y armonía, se desea lo mejor para la otra persona alegrándose y festejando juntos sus logros. Dos personas pueden compartir un proyecto de vida fungiendo cada uno como estímulo para el otro, apoyándose mutuamente, como iguales. Para que no surja envidia entre la pareja, deberíamos ser consciente de que unos somos buenos para unas cosas y otros para otras, unos podemos poseer capacidades y habilidades para destacar en algunas cosas y el otro puede carecer de ellas, igualmente hay cosas en las que no podemos ser exitosos, pero nuestra pareja sí, por lo tanto ambos se complementan.