Hoy en día es un poco controversial el tema de los regalos cuando llegan estas temporadas, pues hay gente que les deja Santa Claus, otros Los Reyes Magos o en su caso ambos.
Algunos creen que Santa Claus es un invento norteamericano y de consumismo, sin embargo ambas creencias nacen de la religión.
Empecemos con Santa Claus, como lo habíamos mencionado, no fue un invento norteamericano, si no que este personaje nació por la influencia de San Nicolás de Bari, un individuo, miembro del cristianismo, el cual gustaba de regalar dinero para ayudar a la gente mientras dormían. Al fallecer y haberse convertido en santo, se decidió establecer la tradición anual que dictaba que los padres harían la misma acción con sus hijos. Cuando llegaron los primeros migrantes a Estados Unidos, se creó la versión anglosajona llamada Santa Claus, y la tradición se trasladó al 24 de diciembre, para empatar con la llegada de Jesús.
Por su parte, la tradición católica, la Epifanía, fiesta de la Iluminación, adoración de los Reyes o Día de los Reyes, celebra la visita de los magos de Oriente a Jesús después de su nacimiento. Santiago de la Vorágine, propone que este evento fue a los trece días de nacido Jesús.
Se cree que eran magos guiados por una estrella, llegan hasta Belén (tras una parada en Jerusalén, en el palacio de Herodes) para entregar obsequios al Hijo de Dios. Se dice que al entrar al portal “vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra” (Mateo, 2:11), elementos que representan a Jesús como rey, Dios y mortal, respectivamente. Y como representación de ésto es que hoy en día los padres le entregan a sus hijos presentes.
Cada traducción es respetable y cada familia le da su propio significado, por lo que no importa quién les traiga a tus hijos, lo importante es que tú le des una linda connotación, aportes a la fantasía y magia para con tus hijos y respetemos las tradiciones de otros hogares para que todos sigamos viviendo la magia de estas fechas.