Estaba el otro día recordando lo que nosotros hacíamos cuando eramos niños y teníamos vacaciones y no recuerdo jamás haber estado en un curso de verano o en actividades, recuerdo perfecto que eran los momentos en donde había que ser creativo para inventar, innovar y no aburrirnos.
Hoy en día, somos más las mamás que tenemos y/o queremos salir a trabajar y por ende la necesidad de tener que buscar espacios y actividades para que los niños estén mientras uno va a la oficina, juntas o lo que el trabajo implique.
El otro día justo platicaba con una amiga y decíamos que ya no les damos chance de aburrirse, son tantas las actividades en las que los tenemos para mantenerlos ocupados, que ¿a qué hora se aburren?
Si eres de las mamás o papás que están pensando qué poner a hacer a su hijo, te tengo una buena propuesta, un día diles que no hay televisión y tampoco planes, que es día libre y déjalos que supuestamente no hagan nada o se aburran. Seguro al principio te van a decir que necesitan el ipad, la compu, la tv o tu celular, diles que una vez a la semana (tal vez para comenzar) no hay aparatos eléctricos; te vas a impresionar cuando te des cuenta que en menos tiempo del que te imaginas ya están organizando, armando o creando algo, y esto, es súper importante papás, es parte del desarrollo sano de un niño.
Según el psicólogo educativo Borja Quicios, los beneficios del aburrimiento en un crío son los siguientes:
El aburrimiento es la antesala de la creatividad. Los niños deben utilizar ese tiempo en el que nada les satisface (se aburren) para crear e inventar.
El tiempo libre es fundamental ya que surgen grandes ideas en estos momentos de relajación. En esta libertad el niño puede desarrollar muchas capacidades positivas para su crecimiento. Gracias al aburrimiento el niño desarrolla la autonomía personal, el pensamiento propio, abren su mente a ideas nuevas y desarrollan la imaginación.
Además de esto, algo que también ayuda muchísimo si los críos se aburren es a ser tolerantes, creativos y resolutivos, claro porque en el momento en que no les resuelves o das algo en qué entretenerse, haces que toleren esos momentos, resuelvan y busquen qué hacer por ellos mismos, no estar todo el tiempo esperando a que un tercero lo haga o le de qué hacer
Otra cosa que el experto menciona, es que cuando el pequeño dice que se aburre, no siempre responde a una emoción de aburrimiento. Muchos niños cuando están tristes, molestos con algo, o tienen miedo, recurren a esta frase para expresar sus emociones. Por tanto, es importante que los padres puedan descubrir qué emoción se encuentra detrás de la demanda que hace el niño para poder ayudarle de la manera apropiada.
Papás, yo entiendo perfecto que no podemos tener a nuestros hijos fuera del contexto en el que vivimos, pero intentemos que sean niños el mayor tiempo posible, dejémoslos ensuciarse, arrastrarse, brincar, mojarse, crear y aburrirse, y nosotros aprendamos a observarlos en estos tiempos, a la larga lo van a agradecer.